Hoy puedo decidir

Tengo tan sólo 23 años, una familia decente, se podría decir que no tuve una infancia difícil. Nunca me faltó nada y en mi casa se desborda amor. Fui creciendo y juntándome, con malas  gentes, tras pasar me una temporada en un reformatorio decidí que ya era hora de cambiar el trascurso de mi vida y empezar a estudiar, tras hacer un trato con mis profesores conseguí que me dejasen salir por las tardes a la biblioteca, empecé a interesarme por el derecho y leí demasiados libros, descubrí mi pasión por la lectura de muchos temas. Tras cumplir mi condena, volví a mi casa y seguí con mi vida, al cumplir los 18, decidí mudarme para estudiar derecho de una prestigiosa Universidad, saque el curso con bastante facilidad, conocía el chico que sin yo saberlo se convertiría en una persona imprescindible en mi vida. Nos fuimos juntos de vacaciones en verano, él no era de una familia muy pudiente, así que yo decidí pagar sus viajes. Yo sabía lo mucho que se había esforzado por conseguir la beca de estudios.

Pasamos un verano maravilloso, tocaba volver a la Uni, así que volvimos juntos, el segundo año no me pasó tan rápido pero gracias a él todo fue más fácil.

Decidí que el verano lo pasaría con mi familia, el vino conmigo, mi madre tenía muchas ganas de conocerle y le cayó muy bien, el verano se pasó muy rápido y volvimos a nuestro último año de carrera.

Este año nos distanciamos mucho, pero aun así coincidimos en muchas clases.

Terminé la carrera con unas notas bastante buenas, pero sin él.

Empecé a trabajar y tras dos años me trasladaron a otra ciudad, había pasado ya mucho tiempo y yo ya ni me acordaba del chico de la Uni.

Llegue y de repente como si de la nada, él estaba allí, tuve que trabajar con el mano a mano para un caso muy importante, pasamos mucho tiempo juntos y volvimos a estar muy unidos. Resolvimos el caso y a nuestro cliente le declararon inocente, sólo nos teníamos el uno al otro en aquel lugar tan diferente a nuestro hogar.

Un día me llamó mi jefe y me propuso un ascenso lo cual conllevaría separarnos de nuevo, hoy puedo decidir si volverá separarme de el o seguir juntos por mucho más tiempo.

Marta Rivaya Fernández. 15 años.