Autor: José Luis Blanco Sarmiento
Porfolio Fiestas de El Carmen de Somió 2011
El jueves día 16 de septiembre, previo al inicio del “Camino de Santiago”, realizamos una etapa en tren a Noreña y caminando luego por Granda y Colloto llegamos a visitar en La Catedral de Oviedo al Salvador. Fueron 13 km. que realizamos por aquello de ir a visitar al Criado y olvidarse del Señor.
El domingo día 19, comienza la aventura en la estación de ALSA de Gijón a las 7,00 h, en dirección a Lugo, a donde llegamos a las 11,00 h. allí teníamos que esperar un autobús que nos llevaría a Sarria a las 12,00 h. y nos dedicamos a recorrer la muralla y el casco histórico, para hacer tiempo. En Sarria pasa el “Camino Francés” y aquí nos acoplamos, son 112 km. hasta Santiago. A las 13,15 h. empezamos la primera etapa del camino, cansados del viaje y con un fuerte calor, llegamos a Portomarín a las 19,00 h. con bastante fatiga. Fueron 21,5 km.
El lunes día 20, salimos de Portomarín a las 8,20 h. y después de recorrer 23 km. muchos de ellos en suave, pero continúa subida, llegamos a Palas de Rey a las 14,10 h.
El martes día 21, no madrugamos como otros días, salimos a las 8,40 horas, con la idea de llegar a comer a Melide, mitad de la etapa del día, y lugar ideal para degustar el pulpo, bueno, rico y barato. Aquí estuvimos desde las 12,30 h. hasta las 14,15 h. y continuamos camino, con el estómago agradecido, para llegar a las 18,15 h. a Arzúa. Habíamos recorrido 28 km.
El miércoles día 22, madrugamos porque el recorrido del día eran 35 km. salimos a las 7,20 h. comimos en Amenal y a las 16,00 h. pasamos por el aeropuerto de Lavacolla, llegando al Monte de Gozo a las 17,20 h. fin de la etapa. Este mismo día salía un autobús de Gijón, comerían en La Coruña y visitarían la ciudad y por la tarde llegarían a Santiago al Hotel Compostela, donde quedarían alojados.
El jueves día 23, se unió a nosotros el grupo que había ido en autocar y partimos desde el Monte de Gozo, hasta La Catedral de Santiago, una distancia de 5 km. nos separaba. Una vez allí, colas para todo, sellar la credencial y conseguir La Compostelana 2 horas, también colas para entrar a la Santa Misa y para abrazar al Apóstol. Por la noche estaba programada una cena en un restaurante de las afueras con “queimada” incluida.
El viernes día 24, ya regresamos y tenemos una visita cultural a un gran Monasterio, en Sobrado de Los Monjes, guiados por uno de los 22 monjes del Cister que viven en el lugar, nos explica y enseña cosas muy interesantes de la historia y el arte del edificio. Tienen hospedería para los amantes de la Paz y el silencio. A continuación, nos dirigimos a Villalba para comer en el Parador, un buen menú en un lugar encantador. Seguimos camino para hacer la última parada en Cudillero y poco a poco ir despidiéndonos unos de otros hasta la próxima aventura.
Para los amantes de la naturaleza el “camino” discurre por parajes maravillosos, bosques que te dan la sombra que necesitas para combatir el sol, fuentes para calmar la sed y muchos sitios donde tomar un refrigerio. El “camino” es algo que hay que vivir y es muy difícil de explicar, para darse cuenta de la emoción que se siente con la cantidad de peregrinos que nos unimos con un mismo fin, llegar para abrazar al Apóstol. El saludo que continuamente nos damos de “buen camino”, te llega al corazón. Compañeros de fatiga que no conocías y te comentan sus vivencias, sus problemas de pies, etc., las amistades que vas haciendo. La verdad merece la pena con creces el sacrificio de lo realizado.
