Autor: Gonzalo Cuesta Fernández
Porfolio Fiestas de El Carmen 2023
Con el paso del tiempo se va escribiendo la Historia, aunque haya personas y acontecimientos que se olvidan. Que en 1842 se abriera la Carretera Carbonera y en 1843 se autorizara la construcción del Ferrocarril de Langreo pudiera no parecer importante, pero ello sirvió para potenciar el Puerto de Gijón y el desarrollo industrial de la ciudad. Y digno es de mención el recordar a los muchos somionenses que de una u otra forma estuvieron involucrados en la Historia Ferroviaria.
El Ferrocarril de Langreo, en concreto, desde el Consejo de Administración y Accionariado con miembros de las familias de Gerónimo Valdés, Canga Argüelles, Vicente Bertrand, Heredia Guilhou, Ignacio Pidal y Hermanos Felgueroso y otros.
Y, más tarde, en Dirección y Personal y Oficios, contó con residentes o vinculados a la Parroquia de Somió. Como Jefe de Talleres, Celestino Piñera, también concejal del Ayuntamiento, y Valentín Barredo García.
Vecinos de El Pisón, Aurelio Canal y José Tuya (Jamino) en la Sección de Forja, y los hermanos Rubiera, de El Casín, Octavio, Gerardo, Belarmino y Luis y José Ramón Cifuentes Cifuentes en diversas dependencias de Talleres y Trenes.
En administración Manuel García Morán, de Villamanín. Y otros más.
A mediados del pasado siglo, bajo la Dirección de Carlos Roa Rico, el Ferrocarril vivió una transformación muy importante, tanto en lo técnico como en lo social. Se inició el cambio del vapor por el diésel y eléctrico, con la importación de Estados Unidos de locomotoras y trenes, colaborando la naviera Ruiz de Velasco. Y labor muy importante, en lo social, fue la formación y promoción del personal y ayuda a la vivienda. En la subida a la Providencia Evaristo Fernández-Miranda, Jefe de Almacén, montó una Granja Avícola.
Fruto del reconocimiento a la labor de Roa Rico es la dedicación de una calle en el Camino de Las Magnolias, donde construyeron viviendas empleados del Ferrocarril.
En junio de 1972, los ferrocarriles fueron fusionados a FEVE (Ferrocarriles Españoles de Vía Estrecha) estando en ese momento Javier Loring Guilhou y Amós Romero Morellón como Gerente y Director de la Compañía respectivamente.
Y, también, no es de menor importancia que a principios de 1900 se fundó el Ferrocarril de Carreño, con destino a El Musel, donde ejerció muchos años como Director Julio Antonio Paraja Álvarez, concejal del Ayuntamiento en 1954, que también mantuvo la Dirección de ambos ferrocarriles ya dependiendo de FEVE hasta el año 1983. Digno de mención es el hecho de que, en los terrenos de su casa, en la Colonia del Piles, instaló un vagón de tren con múltiples motivos ferroviarios a modo de Museo, que posteriormente se cedió al Museo del Ferrocarril.
Nos consta que el recuerdo y la amistad siguen vigentes entre los descendientes de los ferroviarios de Somió.